Posted on 03 August 2020
Los medios liberales en español de la nación suelen pegar el grito en el cielo cada vez que sale a la luz un incidente racista perpetrado contra inmigrantes latinos. Todo tipo de despecho hacia una persona basado en su raza es 100% inaceptable y reprochable; sin embargo, esos mismos medios justicieros eligieron privar a su audiencia de un incidente de racismo atroz contra inmigrantes cubanos en Louisville, Kentucky, de la mano de los nuevos súper héroes de la prensa liberal: Black Lives Matter.
Evidentemente, esta noticia no dio la talla ni para Univisión ni Telemundo, por lo que MRC Latino la reproduce, en español, uno: para que se entere, y dos: para demostrar la doble vara de los noticiarios en español que sólo reportan los temas e incidentes alineados con sus agendas políticas.
El hecho de que un negocio, en este caso, un popular restaurante de comida cubana en Louisville, Kentucky, sea el blanco de ataques, vandalismo y acoso, aparentemente no da el corte racista para las principales cadenas de televisión hispanoparlante en Estados Unidos. Tampoco les importó que numerosos hispanos empleados por La Bodeguita de Mima, se quedaran sin ingresos gracias a las tácticas de hostigamiento y persecución por parte de líderes del movimiento Black Lives Matter.
Oprima en ´Expand´ para leer el contenido de este reporte, publicado en inglés el sábado, 1 de agosto de 2020, en periódico Louisville Courier Journal.
Comunidad cubana organiza manifestación en restaurante de NuLu tras exigencias de Black Lives Matter
Bailey Loosemore Louisville Courier Journal
Integrantes de la comunidad cubana de Louisville planifican reunirse el domingo, en apoyo al dueño de un restaurante en el sector NuLu que dicen fue amenazado por manifestantes de Black Lives Matter durante una protesta reciente.
Fernando Martínez, socio del Grupo de Restaurantes Olé, fue uno de decenas de propietarios de negocios en el distrito del centro de Louisville que recientemente recibieron una carta de parte de los manifestantes, detallando sus exigencias para mejorar la diversidad en la zona, conocida por sus tiendas y restaurantes de propiedad local.
Martínez denunció las demandas públicamente en Facebook, tildándolas de "tácticas mafiosas" utilizadas para intimidar a los dueños de negocios. El jueves, un pequeño grupo de manifestantes lo confrontó frente a su nuevo restaurante, La Bodeguita de Mima, en East Market Street.
"Llega un momento en la vida en el que tienes que defenderte y tienes que probar realmente tus convicciones y creencias", escribió Martínez en Facebook. "... Toda la gente buena necesita denunciar esto. ¿Cómo puedes justificar la injusticia con más injusticia?"
Según un comunicado de prensa, los miembros de la comunidad cubana de la ciudad se reunirán frente al restaurante en NuLu el domingo a las 4 p.m., para apoyar el negocio cuyos dueños son inmigrantes, y que "ha estado sujeto al vandalismo y la extorsión en los últimos días".
El comunicado afirma que La Bodeguita de Mima tuvo que cerrar tras los manifestantes presentarle una lista de exigencias a Martínez, advirtiéndole que "más vale que pongas la carta en la puerta para que no te jod… el negocio".
El restaurante permaneció cerrado por dos días más porque "la gerencia y el personal estaban preocupados por su seguridad", según el comunicado. "Más de 30 miembros del personal (en su mayoría inmigrantes) no pudieron ganarse el sustento".
El jueves, un pequeño grupo de manifestantes regresó al restaurante después de ver que Martínez había publicado sus demandas en Facebook. Mientras estaban allí, un manifestante destrozó una maceta fuera del negocio, mientras que otros hablaron con Martínez y sus empleados sobre la necesidad de cumplir con los mandatos.
Las demandas, junto a un contrato concebido por organizadores y activistas locales, piden a los propietarios de negocios en NuLu que:
Representen adecuadamente a la población negra de Louisville con un mínimo del 23% de personal negro;
Compren un mínimo del 23% de su inventario a minoristas negros o hagan una donación mensual recurrente del 1,5% de las ventas netas a una organización u entidad local negra sin fines de lucro;
Exijan capacitación sobre diversidad e inclusión para todos los miembros del personal cada dos años;
Y, coloquen una pancarta en un lugar visible para aumentar el reconocimiento y apoyo al movimiento de las reparaciones.
Phelix Crittenden, un activista que trabaja con Black Lives Matter Louisville, dijo que las exigencias y los indicadores de "justicia social y bienestar en NuLu "no se supone que fueran ultimátum, sino que estaban destinadas a iniciar una conversación con los propietarios sobre cómo sus negocios pueden reflejar y apoyar mejor a los negros”.
Crittenden, que también fundó la organización Blacks Organizing Strategic Success, dijo que varios propietarios de negocios en NuLu se han ofrecido para firmar el contrato creado por los manifestantes y están dispuestos a discutir sus funciones en la gentrificación de la zona que ha visto cientos de millones de dólares en desarrollos en los últimos años.
Las exigencias de los manifestantes obedecen a su pedido de que los propietarios de negocios reconozcan el daño causado a los residentes negros cuando fueron desplazados de NuLu y el vecindario contiguo de Phoenix Hill, durante la demolición del proyecto de vivienda Clarksdale a principios de la década de 2000.
El complejo de 65 años, que colindó con NuLu en Jefferson Street, fue derribado en 2004 y reemplazado por viviendas de ingresos mixtos que se conoció como Liberty Green.
Según un artículo de 2009 Courier Journal, sólo 41 de las casi 635 familias que habían sido desplazadas en Clarksdale regresaron al nuevo desarrollo.
"NuLu está floreciendo", dijo Crittenden. "Ver esa línea en la arena literalmente, tan pronto como cruzas la calle, es muy inquietante. NuLu no refleja la comunidad en la que se asientan y dicen incorporar y servir".
Para ver las exigencias de los manifestantes, visite Occupy Nulu Demands